
Por Jorge González.
La vida en ocasiones es injusta, cruel y antinatural. Nos hemos levantado con la triste noticia del fallecimiento de un cadista. Un corazón amarillo que nos ha dejado. Aquel que paseaba con orgullo la camiseta por su bendita tierra de Barbate y que ya hoy no volverá a inundar sus calles de luz y de ganas de vivir.
Hoy un cadista nos ha dejado para irse a la línea amarilla del arco iris. Da fuerza a tu peña, David. La necesitan. Te empiezan a echar de menos. A los amigos de “Sección Barbate”, mandarles un abrazo muy fuerte y nuestra mayor de las condolencias.
Que la tierra te sea leve. Eterno corazón amarillo.